Comienza a atronar este lema. Lo escuchamos a nuestro alrededor, en la calle, en la prensa, en las redes sociales. Lo suscribo: somos demasiados los que no nos sentimos Europa, por mucho que sí nos sintamos europeos.

Nos inquieta la deriva de Europa, la fragilidad de sus instituciones, las ignominiosas renuncias en las que incurre un día sí y otro también. Al final, tanto criticar los mal llamados “nacionalismos periféricos” –como si...

Read more